Cargar el vehículo eléctrico en Barcelona ya no es un servicio gratuito desde el pasado lunes 18 de enero, y cargar en la calle puede resultar hasta tres veces más caro que cargar en casa.
El Ayuntamiento de Barcelona ha decidido hacer pagar la electricidad consumida en los puntos de carga que hay en la ciudad condal con el fin de promover y garantizar un uso eficiente de los cargadores, y según anuncian, la finalidad de esta recaudación no es otra que mantener y ampliar los puntos de carga dentro de la ciudad.
Hace pocos años atrás contábamos con una serie de ventajas por el simple echo de comprar el vehículo eléctrico que mejor se adaptara a nuestras necesidades: reducciones del impuesto de circulación, peajes gratuitos y aparcamientos de pago gratuitos (llamados zona azul), la electricidad gratuita en los puntos de carga de la calle era otra de sus ventajas.
Desde el pasado lunes 18 de enero la electricidad consumida en los puntos de carga pasa a ser de pago, y el tipo de tarifa es en función de distintas variables a elección del usuario del vehículo: tarifa diurna o nocturna, carga lenta o rápida, si es un profesional o un particular quien hace uso de ese punto de carga.
A través de la compra de la tarjeta ECOfriend (necesaria para cargar el vehículo en el punto de carga), los usuarios de vehículos y furgonetas pasaran a pagar las siguientes tarifas, diferenciando si el vehículo se carga en la calle o en un parking:
TURISMO / FURGONETA
APARCAMIENTO BSM
Tipo de recarga Normal
0.27 €/kWh Diurno
0.22 €/kWh Nocturno
Recarga mínima: 1.00€
CALLE
Tipo de recarga Rápida
0.40 €/kWh Diurno
0.35 €/kWh Nocturno
Recarga mínima: 2.5€
Encontramos diferentes tarifas y modalidades de tarjeta en función del tipo de vehículo a cargar, la cual aparece identificada en la web https://www.endolla.barcelona/es/modalidades-de-pago.
Según los cálculos, para una carga de 100 km las tarifas serían las siguientes:
Aparcar en la calle: 6,86€
Cargar en el parking: 6,16€
Cargar en casa (horario valle): 1,05€
Cargar en casa (punta): 2,05€
La carga en casa en horario nocturno es un 80% más económico que cargar en la calle, que traducido a un consumo medio de 20.000km al año puede significar un ahorro aproximado de 1.400€.